“Procurar que todo esté listo para el futuro”
En el 3er trimestre de 2022 Kraker Trailers presentó una nueva innovación que daba qué hablar: el E-Force, un semirremolque con piso móvil híbrido. El E-Force guarda la energía que se libera al frenar en baterías especiales y la usa para la aceleración del eje central y durante la descarga. El resultado es un ahorro considerable del uso de combustible. Una innovación así requiere una inmensa capacidad innovadora de todas las partes envueltas. Lea más en este artículo sobre el trayecto intensivo del desarrollo del E-Force.
E-Force: innovación en estado puro
La innovación es un pilar importante con Kraker. Las innovaciones de Kraker tienen como objetivo el mayor valor añadido para los clientes. Con el E-Force ese valor añadido se traduce en ahorro de combustible.
Además, Kraker asume su responsabilidad social y aporta a los objetivos puestos en el Acuerdo de París sobre el cambio climático. En el futuro, se espera que los gobiernos graven la emisión de CO2 con un impuesto. Es una de las razones por las cuales será cada vez más importante para los transportistas conducir con un mínimo de emisiones. El E-Force ha sido desarrollado, porque Kraker Trailers está convencido que el transporte puede hacerse de una manera más inteligente y más limpia.
Con una innovación como el E-Force, varias partes están envueltas. Kris van Meele es potenciador de este proyecto desde Kraker y también Rob Koppejan (RKI Sustainable Solutions) tiene un papel, como consultor externo. Michel van Klink de Van Klink Engineering se ocupa con Kris del diseño técnico. Ellos juntan los componentes y tienen la responsabilidad de la construcción y las pruebas del E-Force. Rick Gijsberts de GOcontroll es el responsable del hardware y el software.
“Con un proyecto así uno empieza por la “prueba del concepto”. En otras palabras: quieres probar la viabilidad de la innovación. Uno no mira cómo se desarrolla el producto, sino, si técnicamente es posible hacerlo. Para tomar este paso utilizamos la HAN University of Applied Science en Nimwega. Después de acabar su trabajo y después de participar sus resultados a Kraker, damos el siguiente paso. Y ese fue el inicio de la cooperación con GOcontroll”, comenta Kris.
GOcontroll Modular Embedded Concepts tomó el proyecto desde el punto donde la HAN lo dejó y siguió con el desarrollo del hardware y del software.
Rick Gijsberts habla sobre el trayecto del desarrollo: “Cuando GOcontroll se subió a bordo, primero averiguamos dónde estaba el proyecto, sobre la base que la HAN ya nos dejó. Analizamos y optimizamos el software ya desarrollado y lo ampliamos con funciones específicas que necesitábamos para las pruebas fiables de campo. Los equipos de control han sido reemplazados por el controlador de sistema GOcontroll Moduline.
La elección de GOcontroll se basa en una amplia experiencia y conocimientos sobre la compañía. GOcontroll emergió en el 2011 desde una demanda por hardware personalizado para varios trayectos de desarrollo. La empresa neerlandesa ya aplicó sus conocimientos antes a varios proyectos para, sobre todo, el mercado de negocios.
Busca los límites del sistema
Rick Gijsberts habla sobre los pasos que tomaron para el lanzamiento del primer prototipo: “Cuando el software y el hardware estaban funcionalmente en el nivel deseado, planeamos los viajes de prueba. El objetivo era buscar los límites del sistema. El E-Force ha madurado en el diseño, pero ahora tenemos que encontrar los problemas iniciales y erradicarlos. Las pruebas que efectuamos en el verano del ’22, servían para seguir afinando el software y para guardar cuanta energía “perdida” posible en las baterías. Después de eso, Bosman en Nisse empezó a usar un E-Force. El E-Force fue probado en la práctica, en un trayecto meticulosamente definido, durante 2 semanas y siempre en las mismas circunstancias. En base a este trayecto escogimos un punto de referencia”, explica Rick. “Así monitorizamos los logros a distancia y realizamos varias puestas a punto por el aire al algoritmo. Esas puestas a punto procuraban la optimización de los logros y nos facilitaban el buscar los límites del sistema.”
Reducción considerable del combustible usado
Dicho de una manera muy banal, el E-Force no es más que una opción de elección para los transportistas, aunque estaría vendiendo corta esa innovación pionera. Hardware y software especial y un paquete balanceado de baterías hacen que el semirremolque guarde energía que es liberada durante el frenado. Usando esa energía durante la descarga o con la aceleración del eje central, uno ahorra combustible. Es un ahorro que puede alcanzar el 20%. Utilizando el doble embrague en el motor eléctrico inteligentemente, el E-Force puede impulsar tanto el eje como la hidrobomba. El motor eléctrico puede ser desacoplado del eje, cuando no se usa. Haciéndolo, tendrá menos fricción. Y todo esto hace único el E-Force.
“El pensamiento detrás del E-Force se puede aplicar en varios semirremolques, pero sí hay exigencias específicas para la construcción del semirremolque.”, explica Rick.
“Aún nos queda por hacer”, continúa. “Los desarrollos no están parados y todo está constantemente en movimiento. La tecnología de las baterías que necesitamos, por ejemplo, tiene un precio bastante elevado. Pero para eso también encontraremos nuevas alternativas”.
Rick no sólo está entusiasmado con el E-Force, sino también con la cooperación con Kraker. “Para este proyecto cooperé estrechamente con Kris, Michel y Rob. Y todo va muy bien. Además, inspira cooperar con una empresa como Kraker, donde la innovación es uno de sus pilares”.